Una mirada al documento presentado por la Cátedra de Derecho Constitucional de la UCV sobre el 10 de enero 2019.
Una mirada al documento presentado por la Cátedra de Derecho Constitucional.
La
Facultad de Ciencias Jurídicas y Política de la Universidad Central de
Venezuela, ha circulado un documento para cerrar el año 2019, cuyo
título orienta claramente el alcance y sentido de su contenido: 10 de
enero. El despotismo apunta a la
disolución de la República.
El
documento es un Importante documento, no sólo por oportuno, aparece días antes
del 10 de enero de 2019, sino porque además de hacer un breve diagnóstico o
radiografía sobre esos hechos que materializan la disolución progresiva de la
República a lo largo de estas dos décadas, plantea una serie de recomendaciones
muy concretas y ajustadas a la interpretación jurídica de los especialistas que
firman el documento, que están dirigidas 3 actores claves en la tarea de
restaurar el orden democrático de Venezuela.
Esos
actores son:
1. Comunidad internacional.
2. Asamblea Nacional.
3. Ciudadanos.
4. Partidos políticos.
A
la comunidad internacional le hace un llamado para que actúe en función del
Derecho Internacional y en exigencia al respeto a los tratados y convenios
internacionales para proteger los bienes de la República, así como también,
para velar por el tratamiento a los refugiados y enfrentar la situación de
riesgo y conflictividad que la crisis venezolana genera; además, el documento
exhorta a la comunidad internacional a que mantengan la presión debida sobre el
régimen en materia de la exigencia al respeto de los derechos humanos.
A
la Asamblea Nacional, le sugieren aprobar un Acuero en el que se reitere y
reconozca como Gobierno de Facto al régimen de Nicolás Maduro y que a través
del mismo se convoque a una consulta nacional a los fines de reiterar el
caracter inconstitucional e ilegitimo de la Asamblea Nacional Constituyente y
en consecuencia de todos sus actos.
Además
sugiere que la Asamblea Nacional se declare en sesión permanente, en emergencia
y que proceda a instalar un Consejo Consultivo, integrado por el Presidente de
la Asamblea Nacional, quien debe presidirlo; la Junta Directiva de la Asamblea
Nacional, las presidencias de las comisiones permanentes y en el que estén
representados los ciudadanos representativos de los factores comprometidos en
la restauración democrática de la República.
Por
último a los ciudadanos y a los partidos políticos, les exhorta la Facultad de
Ciencias Jurídicas y Políticas de la Universidad Central de Venezuela, a
inspirar y motivar su actuación y narrativa en función de los artículos 138,
333 y 350 de la Constitución de la República Bolivariana de Venezuela.
Con
estas oportunas sugerencias, a través del documento, la Facultad aspira “colaborar en la orientación de la vida del
país mediante su contribución doctrinaria en el esclarecimiento de los
problemas nacionales.”
Resulta
importante destacar que el documento aporta importantes elementos para la
narrativa política de los hechos presentes:
1.- Reitera que estamos en presencia de una derogatoria material de la Constitución
Nacional, que se evidencian con 8 hechos concretos que son mencionados en
el documento y que tienen que ver con la actuación del régimen y la
confiscación de la mayoría de los poderes públicos.
Hechos
esos que ya son conocidos y sobre los cuales la Asamblea Nacional ha dejado
constancia escrita mediante Acuerdos de esa progresiva acción derogatoria de la
Constitución.
2.- Se califica al Estado Venezolano como un
Estado Forajido, que también puede ser calificado como Estado Fallido.
En
este sentido el documento aclara que por Estado Forajido, se refiere a un
Estado que sistemáticamente desconoce la
constitucionalidad y la legalidad en materia fundamentales como son el respeto
a los derechos humanos, a los principios
generales del derecho y a los valores democráticos.
Por
Estado Fallido, se refiere a un Estado que muestra la más absoluta incapacidad para atender las competencias que le son
propias y que ha impulsado a millones de compatriotas a migrar, constituyéndose
en un problema social, sanitario, económico, de seguridad manifiesto, no solo
nacionalmente sino que lo lleva a países vecinos, en proporciones
catastróficas.
3.- Se reconoce que el 10 de enero 2019, representa el quiebre de
la República, y se advierte que el mismo magnificará la situación de riesgo
para la Región por el peligro que representa para el orden democrático
internacional
Comentarios
complementarios y finales sobre el documento.
Este
documento, unido al Plan País presentado por el Frente Amplio Venezuela Libre,
en noviembre 2018, así como también, los distintos Acuerdos aprobados por la
Asamblea Nacional desde el año 2016, representan claramente unos importantes
insumos para la construcción de una narrativa política y la definición de una
hoja de ruta para el cambio político en Venezuela.
Este
documento que se presenta desde la Universidad Central de Venezuela, representa
una base extraordinaria para el debate, discusión y valoración por las demás
Escuelas de Derecho y Ciencias Políticas, pero además, como documento base para
retomar los espacios públicos y procurar reivindicar los artículos 62 y 70 de
la Constitución, en el marco del 333 del texto fundamental.
Los
diputados del sector democrático, deben ser los principales facilitadores de un
proceso de divulgación y discusión de un documento como el que se comenta y así
como también, del Plan País, de manera que sean factores políticos de cohesión
social a través de la restauración de niveles de relaciones y lazos sociales
que hoy no están claros o son inexistentes, pero que resultan fundamentales
para darle sostenibilidad al proceso político de cambio que el país reclama y
relegitimar a la Asamblea Nacional como actor fundamental de esa tarea
impostergable de restaurar el orden constitucional y democrático de Venezuela.
El
cambio político no es un tema de tweeter y menos de facebook, es un tema de
redes presenciales, de contacto y encuentro, que reivindique la discusión
política y que facilite el camino hacia la identificación de los consensos
necesarios para volver a conectarnos en función de valores, principios y
expectativas compartidas sobre el desarrollo en democracia.
El
ciudadano debe sentirse parte de ese proceso, desde hace tiempo ha dado todo lo
que ha podido para resistir al régimen, pero la brecha entre la dirigencia
política y la ciudadanía en general, siempre ha impactado negativamente en la
efectividad de las acciones que la ciudadanía ha asumido en el pasado en la
defensa de los valores y principios de la democracia.
El
ciudadano no quiere ser público y menos estar sentado en un teatro como
observador, quiere ser actor.
Hoy
la obra que se escribe en Venezuela, tiene como actor principal a la Asamblea
Nacional y sus diputados. ¿Cómo se van a relacionar ellos con los otros
actores?, es todo un desafío que ha estado presente en distintos Acuerdos de la
Asamblea Nacional desde el 2016 y que hoy es clave para enfrentar con
efectividad los desafíos que impone la nueva realidad política del país.
Este desafío de artículación de la Asamblea Nacional con la sociedad civil, expresa en términos concretos el siguiente llamado que hace el
documento que se comenta:
"Planteamos el rescate
del alma nacional que implica el desafío ciudadano por alcanzar el máximo grado
de solidaridad y compromiso por un futuro distinto, como reto moral que
compromete a todos."
Carlos Romero Mendoza.
30 de diciembre 2018.