Pacto San Antonio de Padua: iniciativa que acerca la Casa Común al Ciudadano.
La
Encíclica Laudato Si reconoce la
necesidad de incorporar a los actores locales en la tarea de enfrentar los
desafíos que plantea los problemas comunes del Planeta. El Papa hace un llamado para que la generación
presente actúe con responsabilidad pensando en las generaciones futuras y en
tal sentido, es oportuno señalar que en Venezuela, el artículo 127 de la
Constitución reconoce que esa labor de cuidar el ambiente no sólo es un deber,
sino que también es un derecho.
El
primer capítulo de Laudato Si, identifica
los principales problemas que afectan a la “Casa Común”, que es la forma como
el Papa Francisco se refiere al Planeta Tierra; esos problemas son: la contaminación
ambiental, producida por el manejo de los residuos; el agua potable y limpia;
el crecimiento desmedido y desordenados de las ciudades; los riesgos sobre la
biodiversidad y la rapidez con la que se impone el mundo digital y que no
necesariamente avanza previendo garantizar el bien común.
El
capítulo V de la Encíclica es dedicado al diálogo como línea de acción básica y
fundamental, en su contenido se exhorta a que los habitantes tenga un espacio
privilegiado en ese diálogo, pues resulta imposible repensar la relación del
hombre con el ambiente, sin incluirlo como actor y sin valorar las
particularidades de cada cultura, de cada sociedad, pues como bien señala la
Encíclica, la calidad de vida no es algo que se pueda imponer, por el
contrario, la misma debe ser asumida y entendida desde cada dinámica en
particular.
Para
que ese diálogo funcione, el Papa Francisco recuerda que es esencial la
información, lo que supone, que todos los actores involucrados tengan la
oportunidad de valorar los riesgos, las posibilidades, pero es esencial,
advierte la Encíclica que la participación de los ciudadanos trascienda a la
simple decisión de un proyecto, para llegar a los niveles de seguimiento y
monitoreo de esos proyectos. La sinceridad y la verdad en las discusiones
científicas y políticas, deben acompañar el contenido de la información y el
espíritu del diálogo.
La
Encíclica Laudato Si expresa su
confianza en la capacidad de las instancias locales de impulsar grandes cambios;
principalmente, porque reconoce que en esas instancias es donde mejor se puede
orientar algunas acciones concretas como la modificación del consumo, el
desarrollo de una economía de residuos y reciclaje, la protección de especies y
la programación de una agricultura diversificada con rotación de cultivos.
Una
interesante iniciativa que puede representar un importante ejemplo de cómo se
concreta el llamado a diálogo y a enfrentar los problemas de la Casa Común
expresados en la Laudato Si desde
actores locales y mediante un diálogo formal, se ubica en Argentina y es denominada Pacto de
San Antonio de Padua.
La
iniciativa argentina fue impulsada desde enero 2016 por un grupo de intendentes
del partido judicialista de la Provincia de Buenos Aires y a lo largo de estos
meses, se han sumado al Pacto Alcaldes de Chile[1] y Gobernadores y Alcaldes del Uruguay[2].
El
Pacto de San Antonio de Padua se presenta en su portal web como un compromiso
para adoptar políticas y acciones en materia social frente a las necesidades y
problemas que requieren atención. Su
contenido, señala el material que sirve de fundamento a este Pacto, resulta de
las reflexiones del Papa Francisco, que de manera reiterada ha señalado el imperativo moral de atender la crisis de
los excluidos del sistema y el daño ambiental que pone en riesgo la convivencia
en esa Casa Común[3].
Independientemente
de las fuerzas políticas que han impulsado este documento con el apoyo de la
Iglesia Católica, el Pacto per sé, representa un esfuerzo importante por
acercar la Laudato Si al ciudadano a
través de los compromisos políticos de asumir con acciones y decisiones los
desafíos que plantean los problemas que afectan a cada ciudadano.
El
Pacto de San Antonio de Padua, asume el compromiso de abordar 10 distintos
temas, a saber:
1.- Lucha contra el narcotráfico.
2.-
Prevención
de la drogodependencia.
3.- Lucha contra el Hambre.
4.- Combate contra la violencia de género.
5.- Defensa de la familia y rechazo al
aborto.
6.- Impulso de las energías renovable.
7.- Combate de la pobreza.
8.- Acceso universal a la salud, la
educaicón y el agua potable.
9.- Erradicación del abuso infantil y la
trata de personas.
10.- Creación de observatorios
par cambiar los paradigmas de conductas hacia el cuidado de la causa común.
Estos 10
temas, son coherentes y están directamente conectados por un lado con la Laudato Si y por el otro, con los 17
Objetivos de Desarrollo Sustentable aprobados en septiembre 2015 por la
Asamblea General de la ONU.
¿Qué tipo de mundo queremos dejar a quienes nos sucedan, a los niños que
están creciendo?, pregunta el Papa en la Encíclica Laudato Si y pareciera que una
iniciativa como ésta, se convierte en una fórmula válida para buscar la
respuesta a esa inquietud, que será una solución integral y con importante base
de legitimidad, en la medida que los habitantes y sus comunidades sean
efectivamente involucrados. El tiempo permitirá valorar si esto fue un intento
más o un compromiso sólido y sostenible.
Carlos Romero Mendoza
15 agosto 2016.
[1]Inforegión.com.ar. Intendentes ratificaron Pacto San Antonio de
Padua. 01 de marzo de 2016. Online en: http://www.inforegion.com.ar/noticia/177583/intendentes-ratificaron-el-pacto-de-san-antonio-de-padua
[2]Diagonales.com. El Pacto de San Antonio de Padua cruza
fronteras: adhirieron los 19 Gobernadores y 115 Alcaldes de Uruguay. 21 de julio de 2016. Online en:
http://www.diagonales.com/369-El-Pacto-de-San-Antonio-de-Padua-cruza-fronteras-adhirieron-los-19-Gobernadores-y-115-Alcaldes-de-Uruguay.note.aspx
[3] Pacto de San Antonio
de Padua. Recuperado el 10 de agosto de
2016. Online en: http://www.pactodepadua.com.ar/