Los distintos rostros del voluntariado a nivel global y en España

“El compromiso mundial respecto a reconocer y aprovechar el papel del voluntariado como parte de la acción de los gobiernos sigue ganando fuerza”, esta afirmación se hace en el Informe sobre el estado del voluntariado en el mundo 2022 (1), en ese sentido y en España, en el año 1996 se reconocía que el voluntariado era uno de los instrumentos básicos de actuación de la sociedad civil en el ámbito social y, como consecuencia de ello, debe tener un papel más activo, lo que supone una mayor participación en el diseño y ejecución de políticas públicas.

Esa afirmación se registra en la exposición de motivos de la derogada Ley 6/1996, de 15 de enero, del Voluntariado, cuyo contenido reconoce que esa participación a que hace referencia, está expresamente señalada en la Constitución de España en su artículo 9.2, que expresamente dice:

Artículo 9:
…..
2. Corresponde a los poderes públicos promover las condiciones para que la libertad y la igualdad del individuo y de los grupos en que se integra sean reales y efectivas; remover los obstáculos que impidan o dificulten su plenitud y facilitar la participación de todos los ciudadanos en la vida política, económica, cultural y social.
…….

La libertad como opción personal de compromiso tanto de los voluntarios como de las personas destinatarias de la acción voluntaria; así como la igualdad de oportunidades de mujeres y hombres en todos los ámbitos de actuación del voluntariado; la no discriminación por razón de nacionalidad, origen racial o étnico, religión, etc. son principios en los que se inspiran la labor voluntaria en España tal y como lo reconoce la Ley 45/2015, de 14 de octubre, de Voluntariado.

Según el Informe sobre el papel del voluntariado en el mundo 2022, el voluntariado es un fenómeno complejo que se expresa a través de distintos “rostros”, ellos son:
  1. El voluntariado de ayuda mutua, que hace referencia a las actividades de ayuda informal que presta una persona a otra, se integra en prácticas comunitarias y culturales.
  2. El voluntariado de servicios, que es aquel en el que los voluntarios responden a las necesidades que, según se percibe, presenta otra persona o comunidad.
  3. Voluntariado para la realización de campañas, que suele implicar la acción colectiva de un grupo o persona para amplificar las voces “marginadas” y cambiar el status quo.
  4. Voluntariado a través de la incidencia, que son aquellos que dedican su tiempo y sus esfuerzos para implicarse en los mecanismos de gobernanza y de toma de decisiones en diferentes niveles.
  5. El voluntariado recreativo corresponde a las actividades voluntarias que reflejan intereses o pasiones personales, en ámbitos como el arte, la cultura y los deportes. También contribuyen a un bienestar y una cohesión generales.
En España la Ley de Voluntariado vigente, también nos presenta unas categorías de voluntariado que claramente nos permite comprender su naturaleza compleja, esas categorías, que podríamos llamar “los rostros” del voluntariado bajo la mirada del marco legal español son:
  1. Social, que tiene que ver con la búsqueda de mayor calidad de vida, cohesión y justicia social.
  2. Internacional, relacionada con la cooperación internacional para el desarrollo, en el tema educativo.
  3. Ambiental, que aborda la relación entre el ser humano y el ambiente.
  4. Cultural, que tiene que ver con el derecho al acceso a la cultura, a la integración cultural, etc..
  5. Deportivo, desarrollo de la práctica deportiva en cualquiera de sus manifestaciones.
  6. Educativo, que busca mejorar las posibilidades de realización de actividades extraescolares y complementarias contribuyendo, en particular, a compensar las desigualdades que pudieran existir entre los alumnos por diferencias sociales, personales o económicas, mediante la utilización
  7. Socio-sanitario, la promoción de la salud, la prevención de la enfermedad, la asistencia sanitaria, la rehabilitación y la atención social que va dirigida al conjunto de la sociedad o a los colectivos en situación de vulnerabilidad.
  8. Ocio y tiempo libre, desarrollo de actividades en el ámbito de la educación no formal, que fomenten el desarrollo, crecimiento personal y grupal de forma integral, impulsando habilidades, competencias, aptitudes y actitudes en las personas, que favorezcan la solidaridad y la inclusión, y logren el compromiso, la participación y la implicación social.
  9. Comunitario. favorece la mejora de la comunidad, y promueve la participación con mayor poder de decisión e iniciativa para resolver los problemas y exigir mayor calidad de vida en los espacios vitales más cercanos donde se desenvuelven los voluntarios, vertebrando una sociedad solidaria, activa, crítica, comprometida y corresponsable.
  10. Protección civil. colabora regularmente en la gestión de las emergencias, en las actuaciones que se determinen por el Sistema Nacional de Protección Civil sin perjuicio del deber de los ciudadanos en los casos de grave riesgo, catástrofe o calamidad pública.
El legislador español, reconoce que el voluntariado se caracteriza porque asume una responsabilidad que se expresa en una acción continuada, que responde a un esfuerzo personal de entrega y dedicación, que además se inspira en valores como la solidaridad, la libertad y la gratuidad.

Además la Ley complementa esas características indicando que además, el voluntariado se vincula con una entidad que opera y desarrolla un programa de voluntariado, cuyo contenido está regulado por la Ley, además de establecer los derechos y deberes de los voluntarios y las entidades en el que se realizan labor voluntaria.

Como ya señalé, la libertad como opción personal del compromiso, es uno de los principios fundamentales que deben inspirar la labor del voluntariado según la Ley española, que además agrega los siguientes principios:
  1. La participación como principio democrático de intervención directa y activa en el espacio público y en las responsabilidades comunes y como generadora de ciudadanía activa y dimensión comunitaria.
  2. La solidaridad con conciencia global que exige congruencia entre las actitudes y compromisos cotidianos y la eliminación de injusticias y desigualdades.
  3. La complementariedad respecto a las actuaciones de las Administraciones públicas, entidades sin ánimo de lucro o profesionales que intervienen en cada uno de los ámbitos del voluntariado.
  4. La autonomía e independencia en la gestión y la toma de decisiones.
  5. La gratuidad del servicio que presta, no buscando beneficio económico o material.
  6. La eficiencia que busca la optimización de los recursos pensando tanto en las personas destinatarias de la acción voluntaria, como en la acción voluntaria en su conjunto, en aras de la función social que ha de cumplir.
  7. La igualdad de oportunidades de mujeres y hombres en todos los ámbitos de actuación del voluntariado.
  8. La no discriminación de los voluntarios por razón de nacionalidad, origen racial o étnico, religión, convicciones ideológicas o sindicales, enfermedad, discapacidad, edad, sexo, identidad sexual, orientación sexual o cualquier otra condición o circunstancia personal o social.
  9. La accesibilidad de las personas con discapacidad, de las personas mayores y de las que están en situación de dependencia.
Y sobre los valores en los que debe descansar la labor voluntaria, la Ley nos señala:
  1. Los que inspiran la convivencia en una sociedad democrática, participativa, justa, plural y comprometida con la igualdad, la libertad y la solidaridad.
  2. Los que promueven la defensa del bien común y de los derechos fundamentales recogidos en la Constitución española, interpretados de conformidad con la Declaración Universal de Derechos Humanos, la Convención de los Derechos del Niño de Naciones Unidas y la Convención de Naciones Unidas sobre Derechos de las Personas con Discapacidad, la Carta de los Derechos Fundamentales de la Unión Europea y la Carta Social Europea.
  3. Los que contribuyen a la equidad, la justicia y la cohesión social.
  4. Los que fundamenten el despliegue solidario y participativo de las capacidades humanas.
  5. Estamos próximos a celebrar el 5 de diciembre Día Internacional del Voluntariado, y el hecho que España tenga una Ley que regule la labor voluntaria, puede responder claramente a un compromiso por reconocer la labor del voluntario, pero no es suficiente para lograr aprovechar el papel del voluntariado como parte de la acción de los gobiernos, para ello hay que mirar en las políticas públicas cómo se diseñan medidas para lograr ese objetivo.
Son muchos los rostros que nos presenta la labor voluntaria, como muchas son las distintas motivaciones que impulsan a cada individuo a dar libremente de su tiempo por un fin particular, pero ahí están, sin grandes protagonismos, en muchos casos con enormes dificultades, pero dando lo mejor de cada uno para ser agentes de cambio a través de acciones que generan impacto social, económico y político. ¿Cuál es el rostro del voluntariado en tú comunidad?.

Carlos Romero Mendoza
@carome31

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1Voluntarios ONU. Informe sobre el estado del voluntariado en el mundo 2022: crear sociedades igualitaria e inclusivas. Diciembre 2022. Online en: https://reliefweb.int/attachments/5b71c6cb-8662-364a-9dd4-1e2e0f8ff479/UNV_SWVR-2022_ES.pdf

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