Estado-Ley-Democracia

I.- La participación ciudadana en la Ley española de cambio climático. Hay que permitir que la ciudadanía participe en las grandes decisiones que tienen que ver con el futuro de la humanidad, más aún en tiempos donde hay una crisis de confianza “brutal” en las instituciones y en la política; nos dice la politóloga Arantxa Mendiharat [1] . Creo que muchos compartimos esa opinión y en consecuencia nos ocupamos por identificar y divulgar, en la medida de lo posible, las formas como las normas jurídicas, en este caso la Ley de Cambio Climático y Transición Energética, diseñan los espacios y mecanismos de participación ciudadana en esta materia. La estructura de la nueva Ley 7/2021, de 21 de mayo, de Cambio Climático y Transición Energética dedicó el Titulo XI a la gobernabilidad y participación pública. En ese título desarrolló 4 artículos, desde el artículo 37 al artículo 40. El artículo 37 nos habla de una participación que podríamos llamar calificada, pues se trata del Comité de Persona

 Articulo escrito para Iberoeconomía y publicado el 17 de mayo 2021. El Plan de Recuperación, Transformación y Resiliencia de España aprobado por Resolución de fecha 29 de abril 2021, plantea que es necesario, preparar las ciudades y pueblos para los retos que ya están presentes, generando entornos urbanos más accesibles e inclusivos, respirables y sostenibles, inteligentes y dinámicos, y una mejora de la competitividad para el sector de servicios en todo el territorio, independientemente del tamaño del núcleo de población. El Ayuntamiento de Valencia, Comunitat Valenciana y el Ayuntamiento de Alcobendas, en la Comunidad de Madrid, registran en medios la activación de procesos políticos de planificación para mirar al 2030 con ojos de sostenibilidad. Tanto Valencia como Alcobendas, durante el año 2020, lograron aprobar sus propias medidas para enfrentar la crisis sanitaria y reactivar sus respectivas ciudades. En el caso de Valencia, fue en junio 2020 cuando luego de tres

 Articulo escrito para Iberoeconomia y publicado el 15 de abril 2021. La Fundación Bertelsmann de Alemania, ha desarrollado desde hace varios años una metodología para valorar los niveles de cohesión social, a través de lo que ha denominado Radar de Cohesión Social , y en el marco de la pandemia, realizaron un estudio el que se advirtió que la pobreza y las condiciones de vida precarias eran la mayor carga para la cohesión social; y reconocieron que la lucha contra la pandemia había favorecido la cohesión social. Otro estudio sobre cohesión social, en el marco de la pandemia realizado por la consultora Ipsos, advertía que en el mundo la cohesión social estaba bajo ataque, y registraba en su Índice de Cohesión Social la información que logró procesar de consultas en 27 países del mundo, entre los cuales estaban Alemania y España, concluyendo que en términos globales, la cohesión social se encuentra en un nivel de debilidad. Para valorar los niveles de cohesión social, la co