Cambio Climático, entre más ambición y más responsabilidad cívica.
I.- En el camino hacia la COP26 II.- Una preocupación compartida entre distintos sectores. III.- La necesidad del diálogo con todos. IV.- El origen humano y las raíces humanas de la crisis medioambiental. V.- ¿Qué podemos hacer?
El cambio climático para algunos es un tema lejano, para otros es un tema de la agenda política para el debate entre las élites; hay quienes incluso, ven el cambio climático como un asunto de izquierdas o de altruismo que ocupa las acciones de las ONGs y para otros, simplemente es un tema que no entienden, por lo que le prestan poco interés.
Quiero mirar en el 2015, la Iglesia Católica y la comunidad política internacional a través de la ONU, se encontraron en un mensaje de reflexión y compromiso para enfrentar los desafíos globales, entre ellos el cambio climático, por supuesto cada uno desde su propia dimensión.
En el caso de la Iglesia Católica fue a través de la Encíclica Laudato Si, sobre el cuidado de la casa común y de la ONU, con la aprobación de los Objetivos de Desarrollo Sostenible del 2030.
Y además, ese mismo año, 2015, la ONU promovió y logró que muchos países miembros de la organización adoptaran el Acuerdo de Paris, que representó un paso global para asumir un compromiso conjunto y concreto para abordar el fenómeno del cambio climático.
Ahora, la comunidad internacional se prepara para reafirmar el compromiso político con la lucha efectiva contra el cambio climático en Glasgow, Reino Unido y sin duda, reflexionarán sobre la necesidad de diseñar acciones más ambiciosas para frenar los efectos del cambio climático.
En este escrito y aprovechando el 6to Informe del Panel Intergubernamental de Expertos sobre el cambio climático, quiero hacer una revisión sobre el mensaje complementario que desde el 2015 ha estado en la agenda global para el debate y el diálogo sobre el fenómeno global.
¿Somos nosotros, como individuos, parte de esos actores que han entrado en ese diálogo?. ¿Ignoramos, nos preocupamos y/o nos ocupamos por sentirnos parte de la solución y no del problema climático?
I.- En el camino hacia la COP26
Se preparan los líderes mundiales para un encuentro que el año pasado fue pospuesto como consecuencia de la pandemia y que ahora, cuando se plantea su realización entre el 31 de octubre y 12 de noviembre en Glasgow, se ha solicitado que nuevamente se retrase, argumentando principalmente que la desigualdad en el mundo en cuanto a la vacunación y las restricciones de ingreso a Reino Unido de algunos países, deja por fuera a un grupo de delegados tanto gubernamentales, como de la prensa y la sociedad civil1.
El gobierno de México es precisamente uno de los países que evalúa no asistir por las restricciones que Reino Unido ha adoptado como consecuencia de la Covid19 2.
La Conferencia de Naciones Unidas sobre Cambio Climático en Glasgow, se realiza en un contexto en el cual el Gobierno de USA vuelve a ocupar su agenda internacional con el tema de la lucha contra el cambio climático; mientras que Australia plantea no seguir el camino hacia el compromiso que se persigue reafirmar con el Acuerdo de París y China, uno de los países más contaminantes aún no ha confirmado su participación.
Por cierto, antes de la Conferencia, el gobierno de USA convocó, el 17 de septiembre, a un Foro de Grandes Economías sobre la Energía y el Clima, en el que participaron: Argentina, Bangladesh, Indonesia, Corea del Sur, México y Reino Unido, además de la representación de la Comisión de la Unión Europea y de las Naciones Unidas y allí el Presidente Joe Biden afirmó que para la COP26 debían llevar la mayor ambición posible3.
Para ese mismo 17 de septiembre 2021 se anunció la publicación de la actualización de los planes nacionales de acción climática, estaban registrados 113 países que mantienen sus compromisos y que representan el 43% de las emisiones de gases de efecto invernadero, incluyendo USA y la Unión Europea, lo cual es un avance importante, pero insuficiente tal y como lo califica el propio informe de actualización4.
Uniendo al Mundo para hacer frente al Cambio Climático, es el slogan que servirá de marco para la la Conferencia de las Naciones Unidas sobre el Cambio Climático (COP26), cuyo objetivo estratégico no es otro que el de acelerar la acción climática para el cumplimiento del Acuerdo de Paris del 2015.
La COP26 se plantea los siguientes objetivos5:
1.- Reducción de emisiones, hasta alcanzar la neutralidad en las emisiones netas a mediados de siglo, para lograr mantener en el objetivo del 1,5 grados.
2.- Protección para las personas y la naturaleza de los peores efectos del cambio climático.
3.- Movilizar al menos $100 mil millones en financiamiento climático por año.
4.- Trabajar juntos frente a los desafíos del cambio climático.
La Conferencia despierta enorme interés, luego que el 9 de agosto 2021 el Panel Intergubernamental sobre el Cambio Climático, IPCC, presentara su 6to Informe, y en el cual nos advierte que hay efectos que ya son irreversibles, pero otros que aún pueden ser enfrentados de manera efectiva, siempre y cuando haya una drástica reducción de las emisiones de gases de efecto invernadero.
El informe además, deja en evidencia que los efectos del cambio climático están afectando a todas las regiones del mundo y destacó que hay muchas evidencias que de manera indiscutible reconocen el origen humano del cambio climático.
Hay que seguir a la ciencia y aceptar la responsabilidad que cada uno tiene en mantener vivo el objetivo de una temperatura de 1,5 grados celsius, es la invitación que hizo el presidente de la COP26, Alok Sharma6 a cada país, gobierno, empresa y en general a la sociedad, destacando además, que la próxima década será decisiva.
Para Greenpace, la COP26 será un momento crítico para detener nuestra carrera en la autopista hacia el infierno climático y además representará una oportunidad para aumentar sus compromisos y cumplirlos de manera coherente con los datos del IPCC.7
“Momento crítico”, “década decisiva”, “reafirmar compromiso”, son algunas de las frases que hoy escuchamos sobre el COP26, como individuos nos resta esperar los resultados de ese encuentro y valorar cómo los mismos, nos permiten confiar en las soluciones propuestas y buscar alternativas para convertirnos en promotores y actores de soluciones y no en parte del problema.
II.- Una preocupación compartida entre distintos sectores.
La Encíclica Laudato Si, sobre el cuidado de la casa común, nos invitó desde el 2015 a un diálogo que aún sigue siendo necesario, sobre la forma como estamos construyendo el futuro del Planeta, y ese mismo año 2015 cuando se publica la Encíclica, la ONU a través de los Objetivos de Desarrollo Sostenible 2030 agregó a esa invitación una agenda concreta de 17 aspectos claves para poder enfrentar con mayor efectividad el camino hacia la sostenibilidad.
Esa agenda además se ha visto complementada, ampliada y reforzada por los diferentes informes que ha presentado el Panel Intergubernamental de Expertos sobre Cambio Climático, IPCC, que recientemente en agosto 2021, hicieron entrega de su 6to informe, que muchos califican como el más completo de todos.
La Encíclica Laudato Si, reclamó en el 2015 la falta de reacción ante el drama de los efectos del cambio climático, lo cual calificó como signo de pérdida del sentido de responsabilidad por nuestros semejantes sobre el cual se funda toda la sociedad civil. (Laudato Si, 25)
Entonces, hizo un llamado urgente e imperioso, al desarrollo de políticas para reducir la emisión de dióxido de carbono y de otros gases altamente contaminantes, pues advertía, que de continuar con los actuales modelos de producción y consumo, los efectos del cambio climático podrían ser cada vez peores. (Laudato Si, 26)
Si bien reconocía que había algunos avances, alertaba que los mismos eran escasos y exigían honestidad, valentía y responsabilidad, sobre todo de los países más poderosos y contaminantes (Laudatio Si. 169), también advertía que en la lucha contra el cambio climático, ed necesario comprender que hay responsabilidades diversificadas.
En el año 2019, la ONU advertía la necesidad de una mayor ambición colectiva, la cual decía debía ser 5 veces más que los niveles existentes, a los fines de lograr los recortes necesarios en la emisión de gases de efecto invernadero para lograr cumplir las metas del Acuerdo de París8.
Incluso en ese momento, el Programa de Naciones Unidas para el Medio Ambiente advertía que la única manera de lograr limitar el calentamiento global a 1,5 grados celsius, era reduciendo las emisiones mundiales de gases a razón de 7,6% cada año entre 2020 y 2030.
Pues bien, llegó el 2021 y el 6to Informe del Panel Intergubernamental de Cambio Climático9, advierte que los efectos del cambio climático se están experimentando en todas las regiones del mundo y en el sistema climático en su conjunto; además, reconoce que los cambios que han observado en el clima no tienen precedentes en ciento de miles de años y destacan que hay algunos cambios que no se podrán revertidos sino hasta dentro de varios siglos o incluso milenios.
Así mismo, reitera el Informe la urgencia de una reducción sustancial, drástica y sostenida de las emisiones de dióxido de carbono (CO2) y de otros gases de efecto invernadero, permitiría poner freno al avance del cambio climático.
Además, advierte el Informe, que aún cuando haya mejoras en la calidad del aire de forma rápida, pasarán entre 20 y 30 años para que las temperaturas mundiales se estabilicen.
Glasgow sin duda será exitoso en la medida que se reafirme el compromiso hacia el Acuerdo de Paris, pero con una mayor ambición en cuanto al objetivo de reducir drásticamente las emisiones de gases, por lo que en esa reunión se medirá el nivel de concienciación de los gobiernos en esta materia.
Y precisamente el llamado a una mayor ambición, sirve de referencia para la creación de una plataforma virtual llamada ambiciónCOP26, que se presenta como una iniciativa que pretende agrupar a distintos agentes de la sociedad civil a los fines de unir voces iberoamericanas, que se hacen presente con un documento titulado Manifiesto por la ambición de la COP2026 y en cuyo texto, exhortan a que la cumbre sea de ambición climática10.
La misma valentía y responsabilidad que exigió la Encíclica Laudato Si, hoy es nuevamente exigida a los gobiernos del mundo, por actores como la plataforma iberoamericana ambiciónCop26 y la propia ONU.
Es necesario asumir la lucha contra el cambio climático con más ambición, pues hay mucho en juego, como dijo en febrero 2021, António Guterres, es necesario afrontar el 2021 como un año crucial.11
No debemos darle espacio en la lucha contra el cambio climático a la “globalización de la indiferencia” como nos dice la Encíclica Laudato Si. (Laudato Si. 52). Esperemos el mensaje de la COP26, pero indiferentemente del mismo, ¿somos indiferentes o queremos ser parte de la solución?.
III.- La necesidad del diálogo con todos.
La pandemia, nos ha llevado a comprender con mayor claridad las palabras de la Encíclica Laudato Si cuando nos recuerda que vivimos en un mundo interdependiente, lo que no significa únicamente entender que las consecuencias perjudiciales de los estilos de vida, producción y consumo afectan a todos, sino principalmente procurar que las soluciones se propongan desde una perspectiva global y no sólo en defensa de los intereses de algunos países. La interdependencia nos obliga a pensar en un solo mundo, en un proyecto común. (Laudato Si. 164)
“No hay tiempo para demoras ni lugar para excusas”12 dijo Antonio Guterres, Secretario General de la ONU y precisamente la COP26 representa ese espacio para concretar esas palabras en compromisos políticos concretos y específicos; para el presidente de la COP26 Alok Sharma, representa la “última esperanza” para impedir el aumento incontrolado de las temperaturas13.
La COP26 es una forma de concretar en el ámbito internacional o global esa invitación urgente que nos hizo la Encíclica Laudato Si, a ese diálogo, a esa conversación que nos debería interesar a todos, porque el desafío ambiental que vivimos, y sus raíces humanas, nos impactan a todos. (Laudato Si. 14).
Cuando Laudato Si nos habla de la necesidad de un diálogo con todos, nos plantea una serie de caminos para promoverlo y para buscar a través de ellos salir del “espiral de autodestrucción en la que nos estamos sumergiendo”, esos caminos son:
Diálogo sobre el medio ambiente en la política internacional y aquí se ubica las distintas Conferencias realizadas.
Diálogo hacia nuevas políticas nacionales y locales, en donde se puede destacar los esfuerzos como en España de aprobar la Ley de Cambio Climático y modelos de intercambio de experiencias como las redes de ciudades frente al cambio climático.
Diálogo y transparencia en los procesos decisionales. Aquí cobra importancia los procesos de información pública de instrumentos legales, como por ejemplo la ordenanza de movilidad.
Diálogo entre la economía y la política para la plenitud humana.
Diálogo entre las ciencias y las religiones.
Tanto la Encíclica Laudato Si, como la Fratelli Tutti publicada en el 2021, reiteran la necesidad que ese diálogo impulse la exigencia de la sociedad por una política que piense con visión amplía, que lleve adelante su replanteo integral, incorporando en un diálogo interdisciplinario los diversos aspectos de la crisis; pero para lograrlo, se requiere que la ciudadanía ejerza su responsabilidad cívica de participar para incidir en políticas públicas y reclamar las decisiones responsables de las autoridades.
¿Cómo lograr ese diálogo?, los mecanismos de participación ciudadana definen el camino institucional, pero no son excluyentes de aquellos otros espacios que la sociedad civil a través de sus ONGs puedan facilitar para informar, incluir y formar.
Según la Encíclica Fratelli Tutti, de octubre 2020, dialogar consiste en: “acercarse, expresarse, escucharse, mirarse, conocerse, tratar de comprenderse, buscar puntos de contacto” y agrega que “para encontrarnos y ayudarnos mutuamente necesitamos dialogar.” (Fratelli Tutti. 211)
Así mismo nos recuerda la Encíclica que sólo con el diálogo es que se ayuda de manera discreta al mundo a vivir mejor, mucho más de lo que podemos darnos cuenta, pero para ello el diálogo debe ser persistente y corajudo.
Las dos Encíclicas mencionadas previamente destacan la necesidad de un diálogo que sea:
Con todos los sectores, reconociendo la existencia de varias posturas.
Intenso y productivo para las partes.
Suficiente para construir respuestas integrales, reconociendo que hay diversas opiniones y posturas, que deben ser respetadas y que sólo a través del diálogo se puede lograr.
Interdisciplinario.
La COP26 con la importancia con la que se presenta en estos momentos, debe procurar no perder la capacidad de escucha, a la que nos hace referencia la Fratelli Tutti, a los fines de lograr los acuerdos y compromisos necesarios para trabajar en conjunto por el Planeta.
IV.- El origen humano y las raíces humanas de la crisis medioambiental.
Nuevamente, la Iglesia, la Ciencia y la Política se encuentra, en reconocer que como seres humanos somos parte del problema pero también actores claves de la solución.
Para Laudato Si, los desafíos ambientales tienen raíces humanas y que el 6to informe del IPCC reitera afirmando que particularmente sobre el cambio climático, no hay dudas sobre su origen humano.
Según el Informe todo el aumento de temperaturas medias globales desde el siglo XIX ha sido impulsado por las naciones que queman combustibles fósiles, talan los bosques y cargan la atmósfera con gases de efecto invernadero como el dióxido de carbono y el metano, que atrapan el calor.E
En ese sentido, es oportuno citar las palabras del Patriarca Ecuménico Bartolomé, que registra la Encíclica Laudato Si, porque nos permite ver que otras religiones también abordan la responsabilidad de nosotros como individuos en la relación con el medio ambiente, a saber:
«Que los seres humanos destruyan la diversidad biológica en la creación divina; que los seres humanos degraden la integridad de la tierra y contribuyan al cambio climático, desnudando la tierra de sus bosques naturales o destruyendo sus zonas húmedas; que los seres humanos contaminen las aguas, el suelo, el aire. Todos estos son pecados». Porque «un crimen contra la naturaleza es un crimen contra nosotros mismos y un pecado contra Dios»
Bartolomé llamó la atención sobre las raíces éticas y espirituales de los problemas ambientales, y nos invitó a buscar soluciones no sólo en la técnica, sino en un cambio del ser humano pues de otro modo afrontaríamos sólo los síntomas.
Por otro lado, desde la ciencia y sobre el Informe del IPCC, nos dicen que es un hecho probado que el ser humano es el responsable del calentamiento global, tal afirmación corresponde a José Manuel Gutiérrez, Director del Instituto de Física de Cantabría, y uno de los coordinadores del Informe; quien además agrega que la evidencia es ya tan abrumadora que no hay duda científica sobre la influencia del ser humano en el clima. Es un hecho que debe marcar el camino para valorar cómo afecta y qué soluciones se plantean.
Así mismo, el coordinador del capítulo 10 del IPCC sobre aspectos metodológicos y Director del Departamento de Ciencias de la Tierra del Centro Nacional de Supercomputación, Francisco J. Doblas Reyes, coincide en afirmar que es un hecho real, hay pruebas y es indiscutible el origen humano del cambio climático. 14
Josep Lluis Pelegri Llopart15, destaca y llama la atención señalando que si bien la humanidad ha ocasionado el cambio climático actual, es la misma humanidad, paradójicamente, la mayor incertidumbre en el futuro climático que nos espera; y se hace una pregunta que es muy oportuna para reflexionar sobre nuestra responsabilidad en esta materia, a saber:
¿Seremos capaces de reinventarnos en nuestros pequeños gestos diarios? Reciclar, reutilizar, reducir… desde el consumo sostenible hasta nuestro goce armónico junto con la naturaleza. La respuesta está en nuestras manos, todos tenemos nuestra responsabilidad personal diaria y todos tenemos la oportunidad de exigir esta misma responsabilidad a nuestros gobernantes?
En gran parte la respuesta a esa inquietud debe ser consecuencia del compromiso que se demuestre en Glasgow.
V.- ¿Qué podemos hacer?
Si buscamos la respuesta en Laudato Si, nos el desafío urgente es proteger nuestra “casa común” y ello pasa por unir a la familia humana en la búsqueda del desarrollo sostenible e integral, pues afirma, que las cosas pueden cambiar.
El patriarca ecuménico Bartolomé, previamente citado, nos recuerda que las soluciones no sólo son técnicas, sino también pasan por el cambio del ser humano, y advierte que si no se aborda desde esa perspectiva, entonces sólo estaríamos afrontando los síntomas.
Tenemos así una responsabilidad ética, además de la legal y la medioambiental, la primera tiene que ver con nuestra conducta, recomiéndanos que no vivimos solos en el Planeta; la segunda que está relacionada con el marco institucional que nos exige unos derechos y obligaciones, y en el último caso, no menos importante, está la responsabilidad que se deriva de nuestra relación con el medio ambiente.
Hay acciones que deben tomar las autoridades de gobierno, bien en el marco de un contexto global como el COP26, a nivel del gobierno nacional, como podría ser la Declaración de Emergencia Climática, adoptada el 21 de enero 2020 y la aprobación de la Ley de Cambio Climático y Energía Sostenible.
Así mismo hay gobiernos autonómicos que además de haber dictado sus propias Leyes de Cambio Climático, han dictado también sus Declaraciones de Emergencia Climática. Casos de Andalucía, Cataluña e Islas Baleares.
Otras Comunidades han dictado sus Declaraciones de Emergencia y están proceso de concretar la aprobación de sus leyes autonómicas sobre el cambio climático, ellas son: Aragón, Asturias, Canarias, Comunidad Valenciana, La Rioja, Navarra, País Vasco. Algunas han llegado a la Declaración de Emergencia como Madrid, Castilla La Mancha, Castilla Y León, Galicia, Cantabria, Murcia y Extremadura.
Muchas de esas comunidades autónomas ya en el 2019 habían tomado la iniciativa de impulsar la Declaración de emergencia climática. Hay municipios que también han tomado esa iniciativa, como Madrid, Barcelona, Zaragoza, Valencia, Sevilla que fue la primera ciudad, según nota de prensa.16
Hay iniciativas interesantes que se han promovido como la Red de Ciudades por Ciudades Climáticas y más recientemente, se anunció que Madrid, Barcelona, Sevilla y Valencia son las primeras ciudades en comprometerse con la neutralidad climática.17
Por cierto el Ayuntamiento de Madrid aprobó la ordenanza de movilidad, a que hace referencia la Ley de Cambio Climático, recientemente.
En todas esas iniciativas y en aquellas que deben existir en las comunidades ¿cómo participa la ciudadanía en ese diálogo y necesaria definición de las acciones?
Para responder a esa inquietud hay que recordar que la ciudadanía tiene también una responsabilidad cívica que se deriva de la ley y que supone, según la Carta Iberoamericana de Participación Ciudadana en la Gestión Pública 2009, participar a través de los mecanismos institucionales en la gestión pública.
¿Cuántos hemos podido participar de manera efectiva en alguna iniciativa orientada a luchar contra el cambio climático desde nuestra comunidad, en nuestro Ayuntamiento en nuestra ciudad?
En ese sentido, ¿conocemos y/o participamos en iniciativas como la que nos ofrece algunas redes de organizaciones como la que hemos citado previamente y que se llama ambiciónCOP26?
La necesidad del diálogo y de unir esfuerzos de todos los agentes para trabajar en conjunto en frenar el avance del fenómeno climático, exige que las iniciativas no queden en manos de los gobiernos, requieren que todos los agentes desde sus ámbitos de influencia identifiquen alternativas para responder con acciones a los desafíos que nos impone el cambio climático.
Informarnos, identificar oportunidades, exigir y hacer seguimiento a las medidas que se adopten son parte de esas acciones a las que estamos llamados como individuos.
¿Queremos ser parte de la solución o promovemos la indiferencia global?, la respuesta es sin duda individual, pero desde el 2015 la religión, la ciencia y la política han sido constantes y se han complementado en el mensaje y reflexiones para que comprendamos los desafíos que hoy enfrentamos como humanidad.
Carlos Romero Mendoza
@carome31
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Referencias.
1 EFE. Ecologistas piden que se posponga la COP26 por el acceso desigual a las vacunas. 7 de septiembre 2021. Online en: https://www.efeverde.com/noticias/ecologistas-piden-que-se-posponga-la-cop26-por-el-acceso-desigual-a-las-vacunas/
2 MSN. En riego participación de México en la COP26. 7 de septiembre 2021. Online en:https://www.msn.com/es-mx/noticias/mexico/en-riesgo-participaci%C3%B3n-de-m%C3%A9xico-en-cop26/ar-AAOchSF
3 France24. Joe Biden y otros líderes mundiales se reunieron para adelantar discusiones frente al COP26. 17 de septiembre 2021. Online en: https://www.france24.com/es/medio-ambiente/20210917-cop26-biden-calentamiento-global-emisiones
4 UN News. El Acuerdo de París podría evaporarse si las emisiones contaminantes aumentan un 16% en el 2030. 17 de septiembre 2021. Online en: https://news.un.org/es/story/2021/09/1496892
5 UkCOP26. Goals. Recuperado el 17 de septiembre 2021. Online en: https://ukcop26.org/cop26-goals/
6 El Mostrador. Reino Unido organizador de la COP26, llama a actuar ante el informe del IPCC sobre el cambio climático: “Sabemos lo que se debe hacer para limitar el calentamiento global”. 9 de agosto 2021. Online en: https://www.elmostrador.cl/dia/2021/08/09/reino-unido-organizador-de-la-cop-26-llama-a-actuar-ante-informe-del-ipcc-sobre-el-cambio-climatico-sabemos-lo-que-se-debe-hacer-para-limitar-el-calentamiento-global/
7 Greenpace.org. Más emisiones, más deforestación y más fenómenos extremos: así se puede resumir el nuevo informe del IPCC. 9 de agosto 2021. Online en: https://es.greenpeace.org/es/noticias/ipcc-cambio-climatico/
8 ONU News. La ambición del Acuerdo de Paris debe quintuplicarse para evitar una catástrofe climática. 26 de noviembre 2019. Online en: https://news.un.org/es/story/2019/11/1465861
9 IPCC. Comunicado de Prensa. 9 de agosto 2021. Online en: https://www.ipcc.ch/site/assets/uploads/2021/08/IPCC_WGI-AR6-Press-Release-Final_es.pdf
10 AmbiciónCOP26. Manifiesto de la ambición cero. Recuperado el 20 de septiembre 2021. Online en: https://ambicioncop26.org/images/manifiesto/Manifiesto_ambici%C3%B3nCOP26_06092021.pdf
11 Europapress. Guterres reclama más ambición en la lucha contra el cambio climático, que afronta el 2021 como el año crucial.9 de febrero 2021. Online en: https://www.europapress.es/internacional/noticia-guterres-reclama-mas-ambicion-lucha-contra-cambio-climatico-afronta-2021-ano-crucial-20210209062938.html
12 Business insider. “Los efectos del cambio climático son irreversibles”: la ONU lanza alerta roja tras los resultados del último informe del IPCC, el más completo hasta la fecha. 9 de agosto 2021. Online en: https://www.businessinsider.es/ultimo-informe-ippc-cambio-climatico-alerta-roja-912265
13 DW. La COP26, última esperanza para frentar el alza de temperaturas. 14 de mayo 2021. Online en: https://www.dw.com/es/la-cop26-%C3%BAltima-esperanza-para-frenar-alza-de-temperaturas/a-57524249
14 El Mundo. Los científicos del clima de la ONU: “el origen humano del cambio climático es inequívoco e indisctuble”. 9 de agosto 2021. Online en: https://www.elmundo.es/ciencia-y-salud/medio-ambiente/2021/08/09/610fbec9fdddff66448b4581.html
15 The Conversation. Informe IPCC: Certezas e incertidumbres sobre el cambio climático. 16 de agosto 2021. Online en: https://theconversation.com/informe-ipcc-certezas-e-incertidumbres-sobre-el-cambio-climatico-165996
16 Diario de Sevilla. Sevilla es la primera gran capital en declarar la emergencia climática. 25 de julio 2019. Online en: https://www.diariodesevilla.es/sevilla/Sevilla-primera-gran-capital-emergencia-climatica-aprueba_0_1376262837.html
17 Gacetin Madrid. Madrid, Barcelona, Sevilla y Valencia, primeras ciudades en comprometerse con la neutralidad climática. 9 de septiembre 2021. Online en: https://gacetinmadrid.com/2021/09/08/madrid-barcelona-sevilla-y-valencia-primeras-ciudades-en-comprometerse-con-la-neutralidad-climatica/
Otras referencias.
Vatican.va. Laudato Si. Sobre el cuidado de la casa común. 24 de mayo 2015. Online en: https://www.vatican.va/content/francesco/es/encyclicals/documents/papa-francesco_20150524_enciclica-laudato-si.html
Idem. Fratelli Tutti. Sobre la fraternidad y la amistad social. 23 de octubre 2020. Online en: https://www.vatican.va/content/francesco/es/encyclicals/documents/papa-francesco_20201003_enciclica-fratelli-tutti.html