Un artículo sobre las Comunas y las Elecciones en CiudadCSC.
Con fecha 20 de septiembre, el portal web del diario CiudadCSC Revolución a diario, registra un artículo firmado por Alfredo Oliva, que transcribo a continuación y que titula
Comunas y Elecciones
La Revolución Bolivariana tiene como objetivo construir una sociedad socialista, un nuevo “Modo de vida”, y esa forma de vida tiene su sustento en nuevas relaciones humanas, de producción y con la naturaleza. Para que este proyecto sea viable, el pueblo en revolución debe realizar una transformación cultural, espiritual y material de la sociedad.
Esta nueva sociedad en construcción tiene como principios y derechos irrenunciables: la vida, inclusión, libertad, igualdad, justicia social, solidaridad, soberanía y la paz, todos ellos conforman los pilares de la democracia, del socialismo.
La Revolución Bolivariana y Socialista ha dado vida a la democracia política: cuya esencia es la participación y el protagonismo, una conquista del pueblo convertida en referéndum popular, en derecho constitucional, y que hoy en el seno del pueblo se transforma en democracia directa.
Las comunas socialistas que hoy se forjan son unidades territoriales, políticas, económicas, sociales, administrativas y de gobierno, donde el pueblo en democracia directa (asambleas populares, consejos, comunas, etc.), decide sobre asuntos como: el presupuesto municipal y/o comunal, la asignación de partidas presupuestarias, los programas sociales, territoriales, políticos, económicos, culturales, ecológicos, de seguridad y defensa etc. Y se aspira en corto plazo, llegar a escoger y revocar los cargos o funcionarios públicos.
Este proyecto socialista y comunal se propone convertir al pueblo en legislador para garantizar la continuidad de los cambios y conquistas: independencia, soberanía, fábricas, alimentación, universidades, escuelas, salud, deportes, las misiones, tecnologías, calidad de vida, etc.
El 26 de septiembre debemos ir a votar por los candidatos del pueblo, de Chávez. Votemos diciendo: adecos, copeyanos y derivados ¡No Volverán!