Teatro Teresa Carreño, Fundación Rómulo Gallegos y Distribuidora Nacional del Cine, se orientan hacia el Socialismo.
En Gaceta Oficial de la República Bolivariana de Venezuela Nº 38.970, de fecha 10 de julio de 2008, se publican 3 Decretos mediante el cual se agrega la orientación hacia la construcción de una sociedad socialista a 3 fundaciones importantes del país: Fundación Teatro Teresa Carreño, Decreto 6.016; Fundación Centro de Estudios Latinoamericano Rómulo Gallegos, Decreto 6.013 y Fundación Distribuidora Nacional del Cine, Amazonia Films, Decreto 6.018.
Los tres decretos tienen en común la redacción del párrafo primero del artículo 2, que dice luego de señalar el objeto de la fundación respectiva, lo siguiente:
Para lograr ello, la Fundación promoverá las medidas que garanticen la participación protagónica y la corresponsabilidad activa del pueblo en la formulación, ejecución y control de su gestión, orientada a la construcción de una sociedad socialista, en aplicación al Plan de Desarrollo Económico y Social de la Nación, siguiendo los lineamientos de la Comisión Central de Planificación. (Subrayado nuestro)
Ahora bien, en este marco de reformas, resulta interesante leer el objeto de la Fundación Teatro Teresa Carreño, que destaca el Decreto mencionado anteriormente, pues la redacción de su objeto destaca términos como los siguientes:
-“Incluyendo a los históricamente excluidos”.
-“Construcción de una sociedad socialista”.
-“Fenómeno de la emergencia de la nueva cultura”.
El artículo 2 del Decreto 6.016, señala que el objeto de la Fundación es:
Creación y ejecución de programas artístico culturales, que enmarcados dentro de las políticas establecidas por el Ministerio del Poder Popular para la Cultura, incidan en el imaginario colectivo para desarrollar valores de arraigo e identidad latinoamericanas y del Caribe, incluyendo a los históricamente excluidos mediante la producción, promoción y difusión de eventos artísticos culturales que reflejen la composición social de nuestros pueblos y el espacio tiempo cultural presente, para de esta manera construir una nueva cultura que fusione al país, bajo valores de soberanía e igualdad orientada a la construcción de una sociedad socialista. Asimismo, promoverá las artes del espectáculo y su difusión nacional, fusionando las categorías universales con las particularidades latinoamericanas y caribeñas, así como las singularidades de nuestro Nación, mediante la incorporación de los creadores que sepan interpretar el fenómeno de la emergencia de la nueva cultura.
Luego de leer esto, y cotejarlo con la declaración de principios del Centro Nacional del Libro, que aparece en su página web, y pensando en el debate que quieren abrir sobre la Ley de Cultura, es perfectamente claro entender el rumbo que se le está dando a la Cultura en Venezuela.
Los tres decretos tienen en común la redacción del párrafo primero del artículo 2, que dice luego de señalar el objeto de la fundación respectiva, lo siguiente:
Para lograr ello, la Fundación promoverá las medidas que garanticen la participación protagónica y la corresponsabilidad activa del pueblo en la formulación, ejecución y control de su gestión, orientada a la construcción de una sociedad socialista, en aplicación al Plan de Desarrollo Económico y Social de la Nación, siguiendo los lineamientos de la Comisión Central de Planificación. (Subrayado nuestro)
Ahora bien, en este marco de reformas, resulta interesante leer el objeto de la Fundación Teatro Teresa Carreño, que destaca el Decreto mencionado anteriormente, pues la redacción de su objeto destaca términos como los siguientes:
-“Incluyendo a los históricamente excluidos”.
-“Construcción de una sociedad socialista”.
-“Fenómeno de la emergencia de la nueva cultura”.
El artículo 2 del Decreto 6.016, señala que el objeto de la Fundación es:
Creación y ejecución de programas artístico culturales, que enmarcados dentro de las políticas establecidas por el Ministerio del Poder Popular para la Cultura, incidan en el imaginario colectivo para desarrollar valores de arraigo e identidad latinoamericanas y del Caribe, incluyendo a los históricamente excluidos mediante la producción, promoción y difusión de eventos artísticos culturales que reflejen la composición social de nuestros pueblos y el espacio tiempo cultural presente, para de esta manera construir una nueva cultura que fusione al país, bajo valores de soberanía e igualdad orientada a la construcción de una sociedad socialista. Asimismo, promoverá las artes del espectáculo y su difusión nacional, fusionando las categorías universales con las particularidades latinoamericanas y caribeñas, así como las singularidades de nuestro Nación, mediante la incorporación de los creadores que sepan interpretar el fenómeno de la emergencia de la nueva cultura.
Luego de leer esto, y cotejarlo con la declaración de principios del Centro Nacional del Libro, que aparece en su página web, y pensando en el debate que quieren abrir sobre la Ley de Cultura, es perfectamente claro entender el rumbo que se le está dando a la Cultura en Venezuela.